Cirugía

29.09.2024

Le corresponde su lugar. Es buena para curar huesos rotos y remediar accidentes y para estados que ya no se pueden solucionar de otro modo. En estas condiciones, puede ser más fácil operarse y concentrar todo el trabajo curativo en conseguir que la afección no vuelva a repetirse. Abundan cada día más los profesionales médicos que están verdaderamente consagrados a ayudar a la humanidad. Cada vez más médicos se vuelven hacia las orientaciones holísticas, que buscan curar a la persona como totalidad.

Y sin embargo, la mayoría de ellos no trabajan con la causa de ninguna enfermedad; se limitan a tratar los síntomas, los efectos.Y esto lo hacen de dos maneras: envenenando o mutilando. Si acude usted a un cirujano, generalmente le recomendará que se opere. Sin embargo, si la decisión quirúrgica ya está tomada, prepárese para la experiencia de tal manera que transcurra con las menores complicaciones posibles, y que usted se cure tan rápidamente como sea posible.

Pídales al cirujano y a su equipo que colaboren con usted en este aspecto. Con frecuencia, en el quirófano, los cirujanos y sus ayudantes no se dan cuenta de que, aunque el paciente esté inconsciente, en un nivel subconsciente sigue oyendo y entendiendo todo lo que se dice. Se de una mujer, miembro del movimiento de la Nueva Era, que necesitó una operación de emergencia y antes de someterse a ella habló con el cirujano y el anestesista para pedirles que por favor pusieran música suave durante la operación y que continuamente le hablaran y se expresaran entre ellos con afirmaciones positivas.

Lo mismo le pidió a la enfermera en la sala de recuperación. La operación transcurrió sin dificultades, y la recuperación fue rápida y agradable. A sus clientes siempre les sugieren que se formulen afirmaciones como: «Cada mano que me toca en el hospital es una mano dotada del poder de curar y que no expresa otra cosa que amor» y «La operación se realiza fácil y rápidamente, con un resultado perfecto».

También se puede decir: «Me siento perfectamente cómodo durante todo el tiempo». Después de la operación, procure escuchar a menudo música suave y agradable, y dígase para sí: «Estoy curándome rápida, fácil y perfectamente, y cada día me siento mejor».

Atienda a las sensaciones, no al dolor. Imagínese que el amor fluye de su corazón, desciende por los brazos y llega a las manos. Póngase las manos en la parte que está curándose, y dígale que la ama y que está ayudándole a que se ponga bien.